Cameron Winery teams up with Energy Trust to become as sustainable as possible
Cameron Winery colabora con Energy Trust para lograr ser lo más sostenible posible
When it comes to making wine, John Paul wants to be truly sustainable.
At Cameron Winery, the Dundee winery he and his partners founded in 1984, the winemaker and his workers take a hands-on approach to avoid running potentially polluting machinery. To minimize their water use, they rely on rain, not irrigation, to grow grapes in a practice known as dry farming. They ferment the grapes with indigenous yeasts. And by working with Energy Trust, they have a new heating and cooling system that is saving energy and pruning Paul’s utility bills.
Energy efficiency is “incredibly important” for Cameron Winery, Paul said.
Take the winery’s 36-year-old, 4,500-square-foot main building, which is home to its office, warehouse and cellar. In winter, the office needs to stay warm enough for everyone to work comfortably. In summer, the warehouse needs to stay cool enough to protect the valuable wine stored there.
So when Paul got an email offering Cameron Winery a free energy study through Energy Trust’s Production Efficiency program, he was in. He’d already had a good experience working with Energy Trust to install solar panels in 2009 and was eager to see what else they could do.
Since the solar panels went in more than a decade ago, Paul said, “energy for harvest in the fall is free.” Each spring and summer, the solar panels generate credits with Portland General Electric that he uses to process the grapes in September and October.
Then came the summer of 2021 and its record heat. Cameron Winery ended up with fewer PGE credits than it needed to get all the way through harvest. “Running my window air conditioner in the winery there just put me over the top,” Paul said.
After emailing Paul, Luis Morales, an Energy Trust outreach specialist, came out to help Cameron Winery identify additional energy-saving opportunities.
During Morales’ visit, he noticed that Paul relied on old resistance heaters and window air conditioners and asked whether he would consider an alternative system.
When Paul said yes, Morales and his team measured Cameron Winery’s energy usage and calculated the difference that a new ductless heating system could make in both efficiency and utility costs. They also found vendors to supply quotes, set up appointments with the vendors and scheduled an installation by the one Paul chose, Husky Heating & Cooling of Newberg.
“We can help as much as possible or as little as the customer would like us to,” Morales said. “People can see us not as a burden on their time, but as an additional resource and a benefit.”
He also invites business owners to see him as their go-to person for any of their energy efficiency questions. “I consider us a long-term partner,” Morales said. In fact, he’s now connected Paul with Energy Trust’s small business lighting offer, which will help Cameron Winery upgrade all its lighting at no cost.
The entire heating and cooling upgrade, from Morales’ initial email to installation of a heat pump that maintains appropriate temperatures for both office space and wine storage, took about five months. During that time, Cameron Winery’s operations continued as usual. As for the paperwork involved, Paul called it “easy peasy,” with Energy Trust again offering assistance to help him claim incentives for the new equipment.
Cameron Winery has yet to go through summer with the heat pump, but “it’s already changed my life in terms of keeping the place warm in the winter,” Paul said. He received $2,165 in incentives that made the pump affordable for his business. And, he said, his heating bills were 75% lower than the year before.
“Doing this sort of thing really does make a difference,” he said of the upgrades. “It changes the whole playing field. If everybody got involved in trying to save energy, we would all be using a whole lot less. And I think it feels pretty good when you can be part of that.”
His advice to anyone thinking about working with Energy Trust? “Don’t hesitate,” he said. “It’s been really beneficial for me.”
Cuando se trata del cultivo de uvas y la producción de vinos, John Paul desea que su operación sea verdaderamente sostenible.
En Cameron Winery, el viñedo ubicado en Dundee que Paul fundó con sus socios en 1984, el enólogo y sus trabajadores evitan operar maquinaria que podía ser contaminadora empleando un método práctico: para minimizar el consumo de agua, dependen del agua de lluvia —y no del riego— para cultivar sus vides, que es un método conocido como agricultura de secano. Fermentan con levaduras indígenas las uvas que cultivan. Además, gracias a su trabajo con Energy Trust of Oregon, tienen un nuevo sistema de calefacción y enfriamiento que ahorra energía y ha reducido el costo de los servicios públicos de Paul.
Dice que la eficiencia energética es «sumamente importante» para Cameron Winery.
Por ejemplo, el edificio principal del viñedo, que tiene 36 años y mide 4,500 pies cuadrados, aloja la oficina, el almacén y la bodega. En el invierno, es necesario mantener la oficina con suficiente calefacción para que todos los empleados puedan trabajar a gusto. A la vez, el almacén debe estar adecuadamente fresco para proteger los vinos valiosos que se guardan ahí.
Por lo tanto, cuando Paul recibió un correo electrónico que le ofrecía una evaluación gratis de las instalaciones de Cameron Winery a través del programa de Eficiencia para la Producción que ofrece Energy Trust, no dejó pasar la oportunidad. Ya había tenido una experiencia positiva con Energy Trust cuando trabajó con la organización para instalar paneles solares en 2009, y estaba entusiasmado por ver qué más podrían lograr juntos.
Puesto que los paneles fueron instalados hace más de una década, «la energía que necesitamos para la cosecha en otoño sale gratis», señala Paul. Cada primavera y verano, los paneles solares generan créditos en Portland General Electric que Paul utiliza para cultivar las vides en septiembre y octubre.
Pero entonces llegó el verano del 2021, con una ola de calor que rompió el récord. El resultado fue que Cameron Winery no tuvo suficientes créditos de PGE para poder operar durante toda la cosecha. «El costo del aire acondicionado montado en mi ventana del viñedo fue excesivísimo», dice Paul.
Luis Morales, un especialista de Energy Trust de extensión a la comunidad, le envió un correo electrónico a Paul y visitó Cameron Winery para identificar más oportunidades para ahorrar energía.
Al llegar, Morales observó que Paul dependía de viejos calentadores de resistencia eléctrica y unidades de aire acondicionado montadas en ventanas; preguntó si consideraría cambiar a un sistema alternativo.
Paul aceptó, y Morales y su equipo midieron el consumo de energía de Cameron Winery y calcularon qué diferencia habría en la eficiencia energética y las facturas de servicios públicos si se instalara un nuevo sistema de calefacción sin ductos. También ubicaron a los vendedores que dieran cotizaciones, programaron citas con ellos y agendaron la instalación con el contratista que Paul eligió: Husky Heating & Cooling de Newberg.
«Podemos ofrecer un nivel de apoyo que se ajusta a las preferencias del cliente —señala Morales—. Ellos no nos consideran una carga sobre su tiempo, sino que como otro recurso y un beneficio».
También invita a los dueños de otras empresas a recurrir a él para cualquier pregunta que tengan sobre la eficiencia energética. «Considero que somos socios a largo plazo», dice Morales. De hecho, ya ha conectado a Paul con la oferta de iluminación para pequeñas empresas de Energy Trust, lo que ayudará a Cameron Winery a actualizar todos sus equipos de iluminación sin costo.
El proceso completo para actualizar el sistema de calefacción y enfriamiento de Cameron Winery —desde el correo electrónico inicial de Morales hasta la instalación de una bomba de calor que mantiene temperaturas adecuadas para la oficina y la bodega donde se almacena el vino— duró aproximadamente cinco meses. Durante todo ese tiempo, el viñedo siguió operando como siempre. Y en cuanto a todo el papeleo que tomó, Paul dice que eso fue «pan comido», ya que Energy Trust otra vez ofreció asistencia para que pudiera obtener los incentivos para el nuevo equipo.
Cameron Winery todavía no ha pasado por un verano con la bomba de calor, pero «ya me ha cambiado la vida en términos de mantener una buena temperatura en las instalaciones en el invierno», dice Paul. Recibió $2,165 en incentivos, que hicieron que la bomba fuera asequible para la empresa. Además, señala que sus facturas de calefacción resultaron ser un 75 % más bajas que el año anterior.
En cuanto a las actualizaciones, Paul dice: «Este tipo de proyecto definitivamente hace una diferencia. Cambia la situación por completo. Si todos participáramos en tratar de ahorrar energía, consumiríamos muchísimo menos. Y uno se siente bien siendo parte de eso».
¿Qué consejos tiene Paul para alguien que esté considerando trabajar con Energy Trust? «No esperes —dice—. Me he beneficiado bastante».