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DeAnna Tapia thought it was all too good to be true.
In her experience, especially after starting a small business with her husband Raul, expenses were constant. They’d pop up from everywhere, and they were usually unexpected. Rarely were there pleasant surprises. Her experience with Energy Trust of Oregon was different.
First, some background:
Tapia, who speaks Spanish, began informally helping out as an interpreter about 20 years ago, when she worked at a hospital. Some of her patients struggled with the language barrier, so she’d walk them through the requirements for forms that needed to be filled out. That eventually led to a meeting with the owner of a physical therapy clinic, who told Tapia that she could do that for a living.
Unsure of what the future held but open to change, Tapia and her husband took the plunge in 2006.
They launched their business, Professional Interpreters, Inc., from humble beginnings, “at my kitchen table,” she recalls. 17 years later, the Salem-based small business employs a full-time staff of 13 plus 250 interpreters who are fluent in 68 languages.
From their home, the business has also expanded its footprint to a multi-lot unit that features a 5,400-square foot building as the company’s base. It wasn’t without growing pains, though. The Tapias made multiple offers on the property, only to be rejected each time. But they persisted once a deal fell through, and thanks to a pandemic-era assistance program, they were able to secure a down payment and open the doors to the space in 2020. “You can’t find anything like this in Salem anymore,” she says.
The new location used to be a dental office, so they had to remodel to meet their needs. “This is an older building. And the lighting was iffy,” Tapia recalls. But their budget didn’t stretch to include lighting.
That’s where Energy Trust came in. Almost a year ago Professional Interpreters participated in Energy Trust’s no-cost lighting offer replace the business’ outdoor security lighting with energy-efficient models.
Tapia found out about the no-cost lighting offer through Jose Soto, Energy Trust’s community outreach coordinator. He’d previously been employed at Professional Interpreters.
“If not for Jose, No. 1, we wouldn’t have known about it,” Tapia says. “And No. 2, we wouldn’t have trusted them because it sounds too good to be true.”
“It just seemed like a scam,” Tapia says of her skepticism. “Like, you have to put a lien on your house or something. It was one of those things where I thought if you do it, they’re going to come back later and charge a lot of money, or they’re going to want something from me.”
Instead, the experience was painless, and the business can expect to save more than $780 a year on its energy bill thanks to the new lighting.
“They come out and they make [the lights] energy efficient, they put brand new lights in and it’s no cost. That’s what we had them do. They come out, they look at it and tell you what they can do. I think they do different things for different companies, but for us, that’s what we needed.”
And now, after lower energy bills and generally brighter and improved lighting, she is a convert.
“I’m just a normal person, a common person, and I took advantage of this,” Tapia says. “It was a benefit to our business and a benefit to us. I would tell anyone interested to try it. It doesn’t cost anything. It won’t hurt you. They’re not going to ask anything from you.”
To any other business owners considering working with Energy Trust, she urges them to follow her lead.
“I think knowing what it is and seeing that someone else was able to take advantage of it and now, almost a year later, I still haven’t had to pay anything.”
Interested in learning more? Contact us today or visit energytrust.org/smallbusinesslighting to see if your business qualifies.
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DeAnna Tapia pensó que era demasiado bueno para ser verdad.
En su experiencia, en especial después de iniciar un pequeño negocio con su esposo Raúl, los gastos eran constantes. Surgían de todas partes y generalmente eran inesperados. Rara vez había sorpresas agradables. Su experiencia con Energy Trust of Oregon fue diferente.
Primero, algunos antecedentes:
Tapia, que habla español, comenzó a ayudar como intérprete informal hace unos veinte años, cuando trabajaba en un hospital. Algunos de sus pacientes luchaban con la barrera del idioma, por lo que los guiaba a través de los requisitos de los formularios que debían completarse. Con el tiempo, eso llevó a una reunión con el propietario de una clínica de terapia física, quien le dijo a Tapia que podía hacer eso para ganarse la vida.
Inseguros de lo que depararía el futuro pero abiertos al cambio, Tapia y su esposo lanzaron el negocio en 2006.
Professional Interpreters, Inc. vino de humildes comienzos: «en mi mesa de cocina», recuerda Tapia. Diecisiete años después, el pequeño negocio con sede en Salem emplea a un personal de tiempo completo de trece personas y doscientos cincuenta intérpretes que hablan con fluidez seisenta y ocho idiomas.
Desde su hogar, el negocio también ha expandido su huella a una unidad de varios lotes que cuenta con un edificio de 5,400 pies cuadrados como base de la compañía. No fue sin dolores de crecimiento, sin embargo. Los Tapia hicieron múltiples ofertas por la propiedad, solo para enfrentar un rechazo tras otro. Pero persistían cada vez que un trato fracasaba, y gracias a un programa de asistencia de la era de la pandemia, pudieron asegurar un pago inicial y abrir las puertas del espacio en 2020. «Ya no puedes encontrar nada como esto en Salem», dice ella.
La nueva ubicación solía ser una oficina dental, por lo que tuvieron que remodelarla para satisfacer sus necesidades. «Es un edificio antiguo, y la iluminación era dudosa», recuerda Tapia. Pero su presupuesto no se extendía para incluir la iluminación.
Ahí es donde Energy Trust se involucró. Hace casi un año, Professional Interpreters participó en la oferta de iluminación sin costo de Energy Trust para reemplazar las luces de seguridad exteriores del negocio con modelos energéticamente eficientes. Todo fue gratuito porque el negocio calificó para el programa de instalación directa para pequeñas empresas de Energy Trust.
Tapia se enteró de la oferta de iluminación sin costo a través de José Soto, coordinador de alcance comunitario de Energy Trust. Anteriormente había trabajado en Professional Interpreters.
«Si no fuera por José, en primer lugar, no hubiéramos descubierto la oferta —dice Tapia—. Y en segundo luegar, no hubiéramos confiado en ella porque suena demasiado buena para ser verdad.
»Parecía ser una estafa —dice Tapia de su escepticismo—. Pensaba que era como poner un derecho de retención sobre la casa o algo así. Era una de esas cosas en la que pensé que si lo hacía, iban a volver más tarde y cobrarme mucho dinero o querer algo de mí».
En cambio, la experiencia fue indolora; ahora, el negocio puede esperar ahorrar más de $780 al año en su factura de energía, gracias a la nueva iluminación.
«Llegan y hacen [la iluminación] eficiente en energía, ponen luces nuevas y no cuesta nada. Eso es lo que les pedimos que hicieran. Visitan, evalúan y te dicen lo que pueden hacer. Creo que hacen cosas diferentes según la empresa, pero para nosotros, eso es lo que necesitábamos».
Y ahora, después de ver facturas de energía más bajas y una iluminación por lo general más brillante y mejorada, ella es una conversa.
«Soy una persona común y corriente y pude aprovechar esto —dice Tapia—. Fue un beneficio para nuestro negocio y para nosotros. Recomiendo que cualquier persona interesada lo ponga a prueba. No cuesta nada. No hay ninguna desventaja. No te van a pedir nada».
A cualquier otro propietario de negocios que considere trabajar con Energy Trust, les insta a seguir su ejemplo.
«Creo que saber lo que es y ver que alguien más pudo aprovecharlo y ahora, casi un año después, todavía no he tenido que pagar nada».
¿Te gustaría aprender más? Contáctanos hoy o visita energytrust.org/smallbusinesslighting para ver si tu negocio califica.
